EEUU
acaba de asestar el primer golpe al creciente mercado del Bitcoin.
Una popular plataforma de negociación en esta moneda, Tradehill, ha
suspendido su actividad por “cuestiones bancarias y regulatorias”
justo en un momento en que los supervisores judiciales y fiscales
estadounidenses estrechan cada vez más el cerco sobre esta moneda
virtual que, de momento, escapa al control de cualquier autoridad.
La
plataforma de negociación, con sede en San Francisco, se había
reinventado precisamente el pasado mes de marzo con el objetivo de
atraer inversores institucionales hacia el Bitcoin. Ahora, a través
de un comunicado en su página web en el que se dan pocas
explicaciones sobre los motivos de fondo del parón o de cuánto se
estima que éste se prolongue, sus responsables hacen gala de “estar
a la vanguardia” de un mercado virtual que “ha demostrado ser
emocionante y dinámico”.
Aunque lamentan, dice el comunicado, tener que haber frenado la negociación de una plataforma que se había revelado como una de las más líquidas para la divisa virtual, prometen aprovechar esta suerte de ‘intermedio’ para “oportunidad para actualizar, mejorar y pulir nuestra plataforma de operaciones”. Lo cierto es que distintos miembros del entorno Bitcoin se reunieron a principios de semana con autoridades federales de EEUU y parece que de poco le ha servido a Tradehill estar registrada ante la Red de Refuerzo contra el Crimen Financiero (FinCEN) desde el pasado mes de agosto. Fecha en que el mismo Departamento de Servicios Financieros de Nueva York envió citaciones a varias empresas involucradas en la cibermoneda.
Tanto en la mayor economía del mundo como en la gran mayoría de los países occidentales, las autoridades buscan desde hace tiempo la manera de regular sobre el mercado Bitcoin. Y es que, incluso sus más fervientes seguidores reconocen que en torno a esta moneda virtual de libre circulación internacional reina un clima de considerable opacidad por el anonimato que permiten algunas plataformas de negociación y compraventa en esta moneda.
Aunque lamentan, dice el comunicado, tener que haber frenado la negociación de una plataforma que se había revelado como una de las más líquidas para la divisa virtual, prometen aprovechar esta suerte de ‘intermedio’ para “oportunidad para actualizar, mejorar y pulir nuestra plataforma de operaciones”. Lo cierto es que distintos miembros del entorno Bitcoin se reunieron a principios de semana con autoridades federales de EEUU y parece que de poco le ha servido a Tradehill estar registrada ante la Red de Refuerzo contra el Crimen Financiero (FinCEN) desde el pasado mes de agosto. Fecha en que el mismo Departamento de Servicios Financieros de Nueva York envió citaciones a varias empresas involucradas en la cibermoneda.
Tanto en la mayor economía del mundo como en la gran mayoría de los países occidentales, las autoridades buscan desde hace tiempo la manera de regular sobre el mercado Bitcoin. Y es que, incluso sus más fervientes seguidores reconocen que en torno a esta moneda virtual de libre circulación internacional reina un clima de considerable opacidad por el anonimato que permiten algunas plataformas de negociación y compraventa en esta moneda.
Fuente : elboletin
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